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La fobia a conducir

La fobia a conducir


La fobia a conducir, como cualquier otra fobia, se manifiesta como un temor excesivo e irracional al conducir o al pensar simplemente en ello. La persona afectada se siente inquieta, puede tener palpitaciones, sudoración. Otros sienten un nudo en el estómago, sensación de vértigo y de pérdida de control. A veces, si se produce mientras se conduce, se imaginan accidentes. Es como si la persona dijera, como decimos muchas veces mientras conducimos o somos acompañantes: ¡Mira lo que ha pasado! ¡Se ha salvado de milagro! Pero la persona fóbica no lo dice tranquilamente. Realmente lo ha visualizado. A veces tiene pesadillas, antes o después de conducir.


Hay personas que se han sacado el permiso de conducir y no han conducido nunca. Generalmente, salvo la sensación de que “no lo podrán hacer nunca”, no padecen ningún trastorno. Han renunciado, simplemente a conducir. Pero hay personas que padecen estos miedos en situaciones concretas: llevar a los niños, que llueva, o tener que conducir de noche. Normalmente son personas que no se consideran a sí mismas demasiado expertas.


En ocasiones aparece después de haber presenciado un accidente. Muchas veces no se confiesa, por vergüenza, porque parece que conducir, hoy, conduce todo el mundo. O porque no se puede prescindir del coche, por razones personales o profesionales. Pero sabemos que conducir en esas condiciones es peligroso, y que es difícil superar estas cuestiones en soledad. Y sobre todo porque la fobia, que aparece como problema, es asimismo una solución.


Una solución a una angustia que se remedia sustituyendo ese temor más grande, para el que a veces no tenemos representación, por un temor representable, pero que a veces trastorna nuestra vida cotidiana. Por esos es importante consultar con un profesional. Ya que, si bien algunas manifestaciones son comunes, cada caso es único y requiere atención especializada.

Por Mónica Aída Gorenberg Blejman 15 de agosto de 2021
Todo el mundo sabe que el trabajo es importante. Más aún, muy importante. Es el recurso para vivir la vida que queremos vivir.
Por Mónica Aída Gorenberg Blejman 1 de agosto de 2021
Muchas veces las personas que acuden a nuestra consulta suelen decir que sabían desde hace tiempo que tenían que acudir.
Por Mónica Aída Gorenberg Blejman 15 de julio de 2021
Pensemos en nuestra actitud respecto del trabajo. Podemos aspirar a un buen trabajo, desde el punto de vista económico, por ejemplo.
Por Mónica Aída Gorenberg Blejman 1 de julio de 2021
Lo normal es una noción muy socorrida, como suele decirse. Parece que el que habla conoce mucho, de lo que sea, ha comparado, realizado estadísticas, o por lo menos, ha tenido ocasión de hablar con mucha gente.
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